El arnés: adiós a las barreras sexuales

Al igual que la mayoría de los accesorios, juguetes y complementos sexuales, el arnés tiene mucha más historia de lo que parece. En realidad existe desde la Antigua Grecia, donde se hacían consoladores de piedra cubiertos de cuero, y se ataban al cuerpo con un trozo del mismo material. Algo tan duro y rudimentario no podía evitar hacer daño, por lo que se usaba aceite de oliva como lubricante. Por suerte, los tiempos cambian, y con ellos avanza la ciencia sexual.

El arnés: adiós a las barreras sexuales

Actualmente el arnés o Strap On es uno de los juguetes sexuales con mayor demanda. Su gran ventaja es su polivalencia, pero también su capacidad para eliminar las incómodas barreras que a veces nos impone el sexo.

El arnés ofrece una amplia variedad de usos: permite, por ejemplo, intercambiar los roles de la pareja, haciendo posible que sea la mujer la que penetre al hombre. Las personas que han practicado este juego aseguran que la excitación que siente el hombre es mucho mayor, ya que la penetración anal le facilita una mayor estimulación de su Punto G. También es un producto muy demandado por las mujeres homosexuales, pues con el arnés recuperan la siempre atractiva -y muchas veces añorada- posibilidad de ser penetradas.

Asimismo el arnés puede ser utilizado por hombres con disfunción eréctil, ya que algunos modelos incorporan un pene hueco, permitiendo al hombre introducir su miembro en dicho espacio y volver a disfrutar así de las relaciones sexuales con penetración.

Sin embargo, no pienses que el arnés sólo sirve para la zona genital, ya que otro de sus beneficios es que puede abrocharse a muchas otras partes del cuerpo, como el pecho, la espalda o el muslo, posibilitando una infinidad de posiciones sexuales.

En cualquier caso, si tu interés no esta en descubrir nuevas posiciones, sino en hacer dos cosas a la vez, el arnés puede ser atado a un objeto (por ejemplo a una silla) permitiendo tanto al hombre como a la mujer ser penetrad@ mientras realiza otras actividades. Además existen arneses dobles que hacen posible una penetración anal y vaginal al mismo tiempo.

Ya lo sabes, el arnés es un producto del que se pueden aprovechar tanto hombres como mujeres, ya sea en relaciones heterosexuales u homosexuales. Su infinidad de opciones en colores, formas, materiales y tipos de estimulación hace que este artefacto sea capaz de satisfacer todo tipo de necesidad sexual.