Condones con más de 200 años

Hace unos días salió la noticia de que unos museógrafos del Archivo Histórico Nacional de Toledo (España), mientras se hallaban analizando documentos del siglo XIX, descubrieron que unas láminas con aspecto de papiro con uno de sus extremos redondeado, no eran hojas de ningún ejemplar de enciclopedia mermado, sino que eran preservativos de la época hechos con intestino de cerdo.

Condones con más de 200 años

"Fue una sorpresa. Estábamos estudiando la correspondencia del Ducado de Béjar entre 1814 y 1830, cuando encontramos el paquete. No sabemos a quién pertenecían pero es probable que procedan de Francia. Su uso era algo común entre la gente pudiente", comentó Arantxa Lafuente, directora de la sección Nobleza del archivo.

Como no podía ser de otra manera, estos preservativos eran utilizados de forma "ilegal", clandestina, y por supuesto, eran reutilizables. Según sus analistas, se caracterizan por su resistencia, son gruesos y muy fuertes. El principal motivo de la utilización de estos preservativos no era la precaución de evitar embarazos, sino que eran la barrera más eficaz para poder disfrutar de los placeres del sexo sin contagiarse de sífilis o gonorrea.

Para su utilización, no bastaba con sacarlos de su cajita e insertar el pene, ni mucho menos. Había que remojarlos en leche para ablandarlos dado que se conservaban muy ásperos, y tras su utilización, desinfectarlos con agua templada y llenarlos de polvos talco o fécula de patata hasta nuevo uso.

Dada su poca elasticidad, la confección de éstos condones era un tanto especial: en un extremo iban cosidos y en el otro extremo llevaban una cuerda para ajustar a la cintura del usuario.

Un poco de historia del condón

No es la primera vez que se encuentran preservativos históricos de hace dos siglos o más:

- Hace un par de años se encontraron otros dos preservativos en un libro de medicina de la Universidad de Salamanca, tal cual, como un marcapáginas más.

- Años atrás, el Museo Británico organizó una exposición en una de sus salas con preservativos de más de 450 años de antigüedad. Verdaderos fósiles del sexo.

- Según el catedrático francés Jean Louis Guereña, "En 1992 la casa Christies subastó uno de principios del siglo XIX, de origen francés, que medía veinte centímetros y que tenía dibujada a una religiosa semidesnuda designando a su amante entre tres eclesiásticos en erección".

- Todos estos ejemplares históricos tienen en común que están fabricados con tripa de cerdo o de cordero.

- Según Margarita Becedas, directoria de la Biblioteca Histórica de Salamanca, años ha, el preservativo "No sólo era un objeto de lujo sino que se utilizaba mucho en ambientes de prostitución como medida de higiene y para evitar enfermedades venéreas".

Como vemos, el sexo no es algo que se inventase únicamente para procrear, y menos que las más altas esferas de la sociedad histórica, no tuviesen sus momentos de placer, únicamente de placer, tomando las precauciones disponibles por aquel entonces, y utilizando los juguetes sexuales construidos también para sus goces íntimos.