Sexo con discapacidad física

La actividad sexual de las personas con algún tipo de discapacidad física sigue siendo objeto de muchos prejuicios, debidos en la mayoría de las ocasiones a la ignorancia de un tema tratado en la actualidad como un auténtico tabú. Mucha más gente de la que podría parecer piensa que los discapacitados son asexuales, estériles o incapaces de mantener una relación sexual completa... pero nada más lejos de la realidad.

Sexo con discapacidad física

Cabe tener en cuenta que el cerebro es el órgano sexual más importante. Por él pasa cualquier tipo de estímulo sexual, excitación o placer. Dicho de otra forma: el cerebro es el centro de operaciones sexuales de nuestro cuerpo. Por lo tanto, un cerebro sano ofrece por sí solo todo un mundo de posibilidades sexuales.

Obviamente, hay distintos tipos de discapacidad física, y el grado de ésta marcará, en cierto modo, las "limitaciones" a la hora de practicar sexo. Sin embargo, una actitud positiva reducirá e incluso suplirá en algunos casos estas pequeñas carencias, haciendo del sexo una experiencia igual o más placentera que la vivida por las personas sin discapacidad física.

Por otra parte, el uso de algunos productos y juguetes eróticos también ayudará a resolver cualquier problema derivado de una discapacidad. Nos referimos a afrodisiacos naturales y cremas vigorizantes para paliar la disfunción eréctil y la falta de libido, lubricantes para aumentar el flujo vaginal, vibradores, consoladores, masturbadores masculinos y estimuladores de próstata para disfrutar tanto en pareja como en solitario, etc.

La integración sexual debe empezar por el propio afectado. Cada discapacitado puede y debe trabajar en su propia sexualidad. De esta forma podrá mejorarla y aumentar poco a poco sus posibilidades. Las familias, médicos y la sociedad en general también jugarán un papel muy importante es este proceso de integración.

Un buen ejemplo de ello lo vemos en la Comunidad Valenciana, donde desde su Conselleria de Bienestar Social se ofrece a las personas afectadas por una lesión medular, esclerosis múltiple y espina bífida un servicio gratuito que les proporciona atención sobre disfunciones sexuales y problemas psicológicos relacionados con el sexo. Su nombre es Discasex, y sin duda se trata de un ejemplo a seguir por el resto de gobiernos autonómicos.

Y es que los esfuerzos en normalizar la vida del discapacitado también deben abarcar la esfera sexual, que tantas veces se deja de lado por resultar un tema incómodo o por no darle la importancia que se merece. Porque el sexo es un placer del que todos tenemos derecho a disfrutar.