Cómo practicar sexo a distancia

Con la interminable crisis económica que estamos sufriendo, muchas son las personas que se ven obligadas a buscar trabajo fuera de su ciudad o incluso fuera de su país. Ello ha provocado en los últimos años un considerable aumento de las relaciones a distancia.

Cómo practicar sexo a distancia

Tanto si es tu caso como si no lo es (nunca se sabe lo que puede ocurrir en el futuro), debes saber que una relación a distancia no tiene por qué ser sinónimo de fracaso. El sexo es, a priori, uno de los grandes inconvenientes de este tipo de relaciones, pero también es cierto que podemos seguir practicándolo de forma diferente.

El sexo telefónico puede convertirse en una actividad increíblemente placentera y divertida. A falta de los sentidos de la vista y el tacto, la imaginación jugará en este tipo de sexo un papel fundamental. Asimismo, las palabras y los gemidos (de cuya importancia ya hemos hablado en alguna ocasión) pueden ser de gran ayuda cuando sólo disponemos de unos pocos minutos para alcanzar el orgasmo.

Tómate el sexo telefónico como si de un relato erótico se tratara, intentando, por ejemplo, que tu pareja imagine que estás a su lado, narrando una escena imaginaria en la que realizas todas y cada una de sus fantasías. También podéis imaginar que adoptáis el rol de clásicos personajes eróticos, como la enfermera y el paciente, la secretaria y el jefe, la actriz y el apasionado admirador, etc.

Otra opción muy excitante puede ser desnudarte e ir describiendo a tu pareja paso a paso todo lo que vas haciendo con tu cuerpo. Hazlo con tal claridad de detalles que el interlocutor tenga la sensación de estar viéndote en primera persona.

Por otro lado, una webcam aumentará aún más si cabe el abanico de posibilidades del sexo a distancia, pues te permitirá ver todo aquello que el teléfono no te deja, con todas las ventajas que ello supone. Invita a tu pareja a que se masturbe delante de la cámara o a que mire mientras tú lo haces. Para ello, puedes utilizar todo tipo de juguetes eróticos, como bolas chinas, dildos o vibradores.

La webcam también te ofrece la posibilidad de realizar un erótico striptease. Hazte con un buen conjunto de lencería erótica y ve quitándote poco a poco las prendas al ritmo de una sensual canción. De esta forma dispararás la libido de tu pareja hasta límites inimaginables.

Las posibilidades son infinitas. No te rindas si tu pareja está lejos ¡y practica el sexo a distancia!