Beneficios del sexo al despertar
¿Te sueles fijar en esas chicas que cada día acuden radiantes a sus puestos de trabajo? ¿Con la piel fina y tersa, mirada brillante, con paso firme y el bolso bien ordenado? Puede tener un por qué: el sexo matutino.
Empezar el día con una buena ración de sexo es como desayunar las tostadas con mermelada o lo que más te guste. Te revitaliza, te refuerza y te aumenta el atractivo interior y exterior. Es lo que trasmitirán y los demás percibirán de ti.
Practicar sexo al despertar un par de veces a la semana, como mínimo, contribuirá a este bienestar personal, tanto en belleza como en salud. Varios estudios han llegado a esta conclusión, pero la evidencia es una fiable muestra.
- El sexo mañanero refuerza el sistema inmune, refuerza las defensas y eso nos protege de infecciones, ya sea un catarro, una gripe o una conjuntivitis.
- La actividad sexual nos ayuda a quemar calorías, por lo que ya es un ejercicio importante de buena mañana. No está mal empezar el día quemando unas 200 calorías con una ración de sexo, y encima disfrutarlo.
- La actividad mejora la circulación sanguínea, y consecuentemente mejora el sistema cardiovascular. Es decir, nuestro corazoncito nos lo agradecerá. Se reduce la hipertensión y con este flujo sanguíneo y liberación de endorfinas, se alivian dolores crónicos como las migrañas.
- En el hombre, aumentan los niveles de testosterona, lo que supone un fortalecimiento de sus huesos, entre otras muchas cosas.
- Y como comentamos anteriormente, estamos más guapos y saludables. El organismo aumenta el nivel de estrógeno y otras hormonas relacionadas con la buena salud de la piel y el cabello, por lo que el sexo mañanero es un buen tratamiento de belleza.Y si no tenemos la suerte de despertar con alguien al otro lado de la cama, siempre podemos echar mano de nuestra mano, valga la redundancia, y regalarnos placer con la masturbación. Y si ya nos ayudamos de un vibrador o masajeador de clítoris (para ellas) / masajeador prostático (para ellos), iniciaremos el día maravillosamente bien.
Lo que un medicamento no puede, consíguelo con el sexo y comienza el día radiante.